El viaje desde Negombo a Anuradhapura te llevará por hermosos paisajes de Sri Lanka y te brindará la oportunidad de explorar lugares históricos y culturales.
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Comenzamos nuestra primera etapa del viaje desde Negombo a Anuradhapura. Estamos muy emocionados ya que va a ser nuestra primera experiencia por un país asiatico y la verdad que no sabemos qué nos vamos a encontrar.
Nuestro alojamiento en esta parte de ruta por Sri Lanka fue en el Liyana Holiday Resort.
Esta primera etapa será la más intensa ya que para nosotros es la primera vez que conducimos un Tuk Tuk, por lo que tenemos que aprender a llevarlo y conducir por este caótico país. Negombo nos ha parecido eso, aunque esperamos que lo que nos espera el día de hoy sea increíble.
Comenzamos nuestro Road Trip por Sri Lanka!
KILÓMETROS TOTALES: 330 km
Alojamiento: Liyana Holiday Resort
Para recorrer el país, decidimos alquilar un tuk-tuk propio y descubrir por nosotros mismos qué hacer con total libertad. Desde España, habíamos reservado nuestro vehículo a través de la agencia Sri Lanka TS Tours. El precio total del alquiler de 10 días fue de 185 €.
Después de hablar con la agencia, fuimos a que nos hicieran una breve clase explicativa sonbre cómo manerjar el Tuk Tuk.
Por fin vamos a iniciar nuestro viaje en Tuk Tuk por toda la isla para conocer cada rincón. Durante los primeros días visitaremos las ciudades que forman parte del Triángulo Cultural de Sri Lanka (Anuradhapura, Polonnaruwa y Sigiriya).
La primera que visitaremos será Anuradhapura. Como te comentamos el día anterior, esa mañana habíamos quedado con la agencia del tuk-tuk para que nos dieran la clase correspondiente de conducción. Por lo visto, la mayoría de las agencias llevan a los turistas al mismo lugar a practicar, así que seguro que te cruzarás con algún turista.
Ahora sí, con nuestras clases hechas, iniciamos nuestro viaje.
Si vas a alquilar un Tuk Tuk, tienes que tener en cuenta que las horas que pone de desplazamiento suelen ser el doble, ya que estos vehículos no corren mucho más de 40 km/h. La verdad es que al tener total libertad en el medio de transporte, te irás parando por muchísimos lugares que no tenías anotados (es lo bueno de ir con tu propio vehículo).
El primer contacto con las carreteras y la circulación te parecerán incómodos, pero tranquilo, solo es cogerle el truquillo. Es por ello que esta primera etapa puede resultar muy pesada. Pero una vez salgas de la ciudad, la circulación no es nada caótica y los paisajes te enamorarán.
Una de las primeras paradas fue Panduwasnuwara Rajamaha Viharaya, es un antiguo templo budista. Está reconocido como un sitio arqueológico. Nos sorprendió la grandeza del templo. Cabe destacar el museo en las instalaciones, hay una colección de artefactos antiguos y exhibiciones que brindan su rica historia.
Después de un buen camino y de comer en un restaurante local en el pueblo de Hiripitiya, nos dirigimos al que será nuestro hotel ese día. Nada más llegar a Anuradhapura, nos cayó una tormenta descomunal, por lo que te puedes imaginar el panorama: no se veía nada y no sabíamos por dónde andábamos, ya que Google Maps te orienta, pero hay lugares que no los marca exactos. Finalmente, pudimos encontrarlo.
Tras dejar nuestras cosas, fuimos a descubrir un poco el pueblo y a ver si paraba de llover. Efectivamente, son lluvias muy intensas pero de poca duración.
Por fin nos encontramos en Anuradhapura, la ciudad sagrada más antigua de Sri Lanka y una de las más turísticas que encontrarás.
En toda la zona de Anuradhapura hay muchísimos templos. Para poder acceder a ellos, debes comprar la entrada en el Museo Arqueológico. La entrada incluye todos los templos.
Como teníamos poco tiempo, solo fuimos a visitar algunos, ya que teníamos el día siguiente para poder visitar el resto. Ahora sé que te cobran una única entrada para poder ver todo, pero antes podías pagar los templos por separado, por eso visitamos primero el Ruwanwelisaya Dagoba.
Decidimos ir a visitar uno de los más importantes de la zona, el Ruwanwelisaya Dagoba. Se trata de una estupa grande y blanca considerada una maravilla.
Para poder visitarla, es obligatorio ir descalzo, como en todos los templos del país, y con un pareo cubriéndome. En la zona central, las personas se ponen a rezar. Para poder rodearla, es necesario que lo hagas en el sentido de las agujas del reloj. Justo cuando fuimos, estaban realizando una ceremonia de introducción de niños budistas que salían a rezar. Fue una maravilla poder contemplar aquella ceremonia.
Con la emoción de haber vivido un momento mágico, que no sabíamos si se repetiría, decidimos ir a visitar otro de los puntos de este lugar.
Se trata del Bodhi Tree, el cual es el árbol milenario plantado en el 288 antes de Cristo y del que se cuenta que es el árbol descendiente del árbol donde Buda llegó a la iluminación. Justo al lado del árbol, se congregan muchos creyentes en su pagoda para realizar el rezo.
Ya estaba anocheciendo y nos dio pena no poder visitar nada más y descubrir este maravilloso lugar. Así que decidimos irnos a nuestro hotel Liyana Holiday Resort para poder cenar y descansar de esta primera etapa que nos había fascinado.
Aquí puedes consultar la siguiente etapa: Ruta por Sri Lanka – Día 3 | Anuradhapura – Trincomalee
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